“La emergencia climática es un peligro para la paz”, dijo Miroslav Jenča, Subsecretario General de la ONU para Europa, Asia Central y las Américas, al pedir a los actores de paz y seguridad que desempeñen su papel y ayuden a acelerar la implementación del hito. Acuerdo de París sobre cambio climático.
‘Circulo vicioso’
“El hecho de no tener en cuenta los crecientes impactos del cambio climático socavará nuestros esfuerzos en la prevención de conflictos, el establecimiento de la paz y el mantenimiento de la paz, y correrá el riesgo de atrapar a los países vulnerables en un círculo vicioso de desastres y conflictos climáticos”, dijo.
Jenča informó al Consejo al comienzo de un debate abierto por videoconferencia sobre el clima y la seguridad, uno de los temas clave de la presidencia alemana de este mes de los 15 miembros.
Tras señalar que las consecuencias del cambio climático varían de una región a otra, dijo que las situaciones frágiles o afectadas por conflictos en todo el mundo están más expuestas a los efectos de un clima cambiante y menos capaces de hacer frente a ellas.
Enlace de mantenimiento de paz
“No es casualidad que siete de los 10 países más vulnerables y menos preparados para hacer frente al cambio climático, acojan una operación de mantenimiento de la paz o una misión política especial”, dijo.
Existen diferencias entre regiones, dentro de las regiones y dentro de las comunidades, con riesgos de seguridad relacionados con el clima que afectan a mujeres, hombres, niñas y niños de diferentes maneras, dijo.
En el Pacífico, el aumento del nivel del mar y los fenómenos meteorológicos extremos representan un riesgo para la cohesión social, dijo. En Asia central, el estrés hídrico y el acceso reducido a los recursos naturales pueden contribuir a las tensiones regionales.
En África subsahariana, Asia meridional y América Latina, el desplazamiento de la población provocado por el clima podría socavar la estabilidad regional. Y en el Cuerno de África y Medio Oriente, los efectos del cambio climático ya están agravando las quejas y aumentando el riesgo de conflicto, proporcionando forraje para los grupos extremistas.
Al describir algunas acciones que los Estados miembros pueden tomar juntos, dijo que las nuevas tecnologías deben ser aprovechadas para fortalecer la capacidad de convertir la previsión climática a largo plazo, en un análisis práctico a corto plazo.
El Sr. Jenča también recomendó asociaciones más fuertes que unirían los esfuerzos que ya están realizando las Naciones Unidas, los Estados miembros, las organizaciones regionales y otros, para identificar las mejores prácticas, fortalecer la resiliencia y reforzar la cooperación regional.