Israel “no es un país, sino una base terrorista”, dijo el viernes el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, e instó a las naciones musulmanas a combatirlo, ya que marcaron un día anual de manifestaciones pro palestinas.
“Israel no es un país, sino una base terrorista contra la nación de Palestina y otras naciones musulmanas”, dijo Jamenei en declaraciones televisadas en vivo con motivo del Día de Al-Quds (Jerusalén).
“Luchar contra este régimen despótico es luchar contra la opresión y el terrorismo, y (hacerlo) es un deber de todos”, agregó.
Sus comentarios se produjeron en medio de altas tensiones entre los archienemigos regionales, luego de una serie de ataques marítimos, una explosión en una instalación nuclear iraní y el asesinato de un importante científico nuclear, que Teherán culpó a Israel.
El Día de Quds se ha celebrado anualmente desde los primeros días de la revolución islámica de Irán en apoyo de los palestinos, pero este año no contó con las manifestaciones habituales a nivel nacional debido a las limitaciones del COVID-19.
Pero a pesar de las restricciones, varias personas salieron “espontáneamente” en la capital, Teherán, dijo la televisión estatal, mostrando la habitual quema de banderas y cánticos de “Muerte a Estados Unidos” y “Muerte a Israel”.
Khamenei también destacó que “el declive del régimen sionista enemigo ha comenzado y no se detendrá”.
Criticó la normalización de los lazos de Israel con “algunos gobiernos árabes débiles” como intentos de socavar “la pesadilla de la unidad musulmana”, y pidió a los palestinos que continúen su resistencia y que los gobiernos musulmanes los apoyen.
La república islámica no reconoce al Estado de Israel y el apoyo a la causa palestina ha sido un pilar de la política exterior de Irán desde la revolución de 1979.
