El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo en el primer período extraordinario de sesiones de la Asamblea General contra la corrupción a través de un mensaje de video que antes de la pandemia de COVID-19, los países de todo el mundo habían sido “sacudidos por enormes manifestaciones contra el gobierno”.
“La corrupción fue uno de los principales agravios de los manifestantes. Podemos estar seguros de que esos manifestantes están observando de cerca ahora, ya que se invierten billones de dólares en la recuperación ”, agregó.
Corrupciones múltiples repercusiones
La corrupción es a menudo sistemática y organizada, un crimen que cruza fronteras y “traiciona a las personas y las democracias”, dijo el jefe de la ONU.
“Roba billones de dólares a personas de todo el mundo, generalmente a los más necesitados, ya que desvía recursos para el desarrollo sostenible”, agregó.
Cuando los poderosos se salen con la suya con la corrupción, los ciudadanos pierden la confianza en sus instituciones de gobierno y las democracias se debilitan por el cinismo y la desesperanza.
“Cambiar el rumbo contra la corrupción es esencial si queremos alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), promover la paz y proteger los derechos humanos”, explicó el Sr. Guterres.
Necesidad urgente
El alto funcionario de la ONU enfatizó la necesidad de revitalizar el compromiso político para combatir la corrupción, fortalecer la cooperación internacional para recuperar los activos robados y evitar que los delincuentes encuentren refugios seguros en el extranjero para ellos y sus fondos.
Llamó a la creación de la Red Operativa Global de Autoridades de Aplicación de la Ley Anticorrupción, o Red GlobE, “un paso en la dirección correcta”.
“La Red permitirá a las autoridades policiales navegar los procesos legales a través de la cooperación informal a través de las fronteras, ayudando a generar confianza y llevar ante la justicia a los culpables de corrupción”, explicó el jefe de la ONU.
Durante el lanzamiento, los expertos anticorrupción discutieron el papel de la Red GlobE para garantizar que todos los países y sus autoridades anticorrupción independientes tengan los contactos y las herramientas que necesitan para rastrear, investigar y enjuiciar la corrupción transfronteriza, incluido el origen, el tránsito y países de destino, de forma rápida y eficaz.
El Secretario General dijo que la Organización continuará brindando asistencia técnica y exhortó a todos los gobiernos a “hacer pleno uso de la red y alentar nuevos esfuerzos para erradicar la corrupción”.
“Poner fin a la impunidad de la corrupción y devolver los bienes robados a sus dueños son pasos importantes hacia un nuevo contrato social basado en la confianza, la integridad y la justicia”, concluyó.