Es sabido que el trabajo de los grandes artistas no se mide en términos exclusivamente monetarios, pero está claro que la industria cinematográfica de Hollywood es la que más cerca está de romper esa regla, y que cada vez que hablamos del éxito o no de un película proveniente de los grandes estudios, uno se pregunta si logró o no recaudar una buena cantidad de dinero.
Es por eso que oppenheimer Resultó ser una de las películas que más destacó luego de su exhibición en salas y su posibilidad de ser alquilada por algunas plataformas de streaming. Es que la película de Christopher Nolan A Universal le costó nada menos que 100 millones de dólares, para una película que duraba más de 3 horas, algo que en principio no resulta tan atractivo para lograr masividad.
Pero el director demostró que su proyecto tenía razón y hoy ha recaudado casi mil millones de dólares, aún sin haber llegado al streaming, por lo que sus ganancias podrían considerarse casi diez veces su inversión. Y Christopher Nolan no es ajeno a este logro, claramente.

Cabe recordar que el director de otras películas como Tenet o Dunkerque no sólo ejerció de director, sino que también fue productor de la película (razón por la que también recibiría el Premio Óscar a la Mejor Película en caso de ganar). Según la revista Forbes, el director habría recibido alrededor de 75 millones de dólares por Oppenheimer.
Esta incomprensible suma se consigue a partir de una tarifa fija (generalmente es un porcentaje del coste de la película, alrededor del 10%) y un porcentaje de las ganancias generadas, es decir, desde el momento en que los ingresos superan a los gastados. Según la revista, habría sido el 15% de dichas ganancias.
Por si fuera poco, este beneficio se refiere a un importe bruto sin deducir impuestos, aunque ha pagado a sus agentes, abogados y al resto del equipo personal que gestiona sus grandes cuentas. Nada mal para un trabajo que además le seguirá dando oportunidades en la complicada industria audiovisual. Claramente ha hecho méritos, tanto artísticos como monetarios.