Más allá de gustos o elecciones, y aunque podría mejorar en el futuro, seguramente los últimos años de la última década pueden titularse como los “años de Maravilla“. El enorme auge de las películas de superhéroes del estudio marcó una tendencia que se prolongó durante muchos años, pero que ha ido disminuyendo significativamente en los últimos tiempos.
Malas campañas publicitarias, polémicas innecesarias, mala renovación y, sobre todo, malas historias, hicieron que, salvo excepciones como Guardianes de la Galaxia Vol. 3, las últimas películas de MCU han sido fracasos tanto comerciales como críticos.

Varios actores y participantes en la escena han dado explicaciones. Desde el reciente ganador del Oscar, Robert Downey Jr., hasta el ejecutivo de Marvel, Brad Winderbaum, quien declaró que Disney se ha bajado la línea de realizar un gran número de producciones de Marvel.
“Había una especie de mandato de hacer todo lo Marvel que pudiéramos para Disney+, lo más rápido que pudiéramos”, dijo el empresario. Así, como comenta, se priorizó la cantidad sobre la calidad, por lo que llegaron numerosas producciones que nunca estuvieron a la altura.

Ahora, la compañía ha delineado diferentes estrategias para salir de esta situación, aunque aún no se sabe exactamente si revitalizarán su imagen con viejos éxitos reciclados, o probarán nuevos personajes. Lo que debe quedar claro es que cantidad no es sinónimo de calidad, y que Disney debe entender que a veces menos es más.