Brandon LeeHijo del icónico artista de artes marciales Bruce Lee, estaba destinado a ser una importante estrella de cine de los noventa. Con un carisma innegable y una capacidad física impresionante, Lee había comenzado a dejar su propia huella en Hollywood con actuaciones destacadas en películas como “Rapid Fire” y “Showdown in Little Tokyo”.
Sin embargo, fue su papel en El Cuervo (The Crow) de Alex Proyas, que reveló su verdadera profundidad como actor, mostrando una vulnerabilidad y un alcance que prometía elevarlo más allá de la estereotipada estrella de cine de artes marciales.
El Cuervo, adaptada del cómic del mismo nombre, se convirtió en una de las películas de culto más influyentes de su época, con un estilo visual distintivo y una banda sonora aclamada. Lee interpretó a Eric Draven, un músico que regresa de entre los muertos para vengar el asesinato de su prometida. Sin embargo, la producción de esta película estaría marcada por una tragedia eso conmocionó a la industria cinematográfica y eclipsó su legado.
Mira el tráiler de El cuervo
Durante el rodaje, en un trágico accidente en el conjunto, leer Fue herido de muerte por un disparo accidental durante una escena con armas de fuego. La bala, que debería haber sido de fogueo, resultó ser un proyectil real y Lee recibió un impacto en el estómago. Llevado de urgencia al hospital, murió horas después a los 28 años, en un hecho trágicamente similar al de su padre, quien también falleció en circunstancias misteriosas a los 32 años.
El rodaje de El Cuervo Continuó después de la muerte de Lee, completando las escenas restantes con el uso de un doble, Chad Stahelski, quien luego se convertiría en director de la saga “John Wick”. A pesar de la sombra que la tragedia arrojó sobre la película, The Raven se estrenó al público y fue un éxito comercial y de crítica.
Michael Massee, el actor que disparó involuntariamente el arma mortal, quedó profundamente marcado por el incidente y atormentado por el recuerdo hasta su muerte años después. Este desafortunado suceso refleja no sólo la tragedia personal de los involucrados sino también la del creador del cómic, James O’Barr, cuya inspiración para crear El Cuervo Surgió de una tragedia personal, cuando su novia fue asesinada por un conductor ebrio.
El Cuervo sigue siendo un testimonio sombrío pero poderoso del talento de Brandon Lee, un recordatorio del potencial no aprovechado y los peligros inherentes a la producción cinematográfica. Su historia continúa resonando entre los fanáticos del cine y sirve como un llamado a mejorar constantemente las medidas de seguridad en los sets de filmación.