WASHINGTON: Kabul no enfrenta una “amenaza inminente” de los talibanes, pero los insurgentes buscan aislar la capital en medio de rápidos avances en otras partes de Afganistán, dijo el viernes el Departamento de Defensa de Estados Unidos.
“Kabul no se encuentra en este momento en un entorno de amenaza inminente”, dijo a los periodistas el portavoz del Pentágono, John Kirby.
“Pero claramente”, dijo, “si se mira lo que han estado haciendo los talibanes, se puede ver que están tratando de aislar a Kabul”.
“No es diferente a la forma en que han operado en otros lugares del país, aislando las capitales de provincia y, en ocasiones, pudiendo forzar una rendición sin necesariamente mucho derramamiento de sangre”, dijo Kirby.
El jueves, los talibanes invadieron la segunda y tercera ciudades más grandes de Afganistán, Kandahar y Herat, días después de que Estados Unidos completara la mayor parte de su retirada de una participación militar de 20 años.
El presidente Joe Biden se ha mantenido firme en su decisión de poner fin a la guerra de Estados Unidos, pero autorizó el despliegue de 3.000 soldados para evacuar al personal de la embajada y a los aliados afganos de Kabul.
El Pentágono reconoció su preocupación por la situación en el terreno, pero dejó en claro que Estados Unidos creía que el ejército afgano era ahora el responsable.
“Hemos notado con gran preocupación la velocidad con la que se han estado moviendo y la falta de resistencia que han enfrentado, y no hemos sido más que honestos al respecto”, dijo Kirby.
“Queremos ver la voluntad y el liderazgo político, el liderazgo militar, que se requiere en el campo”, dijo.
“Si sale bien o no, eso es realmente lo que los afganos deben decidir”, agregó. “Ningún resultado tiene que ser inevitable”.