Marburgo, una enfermedad altamente infecciosa que causa fiebre hemorrágica, se transmite a los humanos por los murciélagos frugívoros. El virus pertenece a la misma familia que el ébola.
Se detectó en la prefectura de Gueckedou, en el suroeste de Guinea, y menos de dos meses después de que el país declarara el fin de un brote de ébola este año que mató a 12 personas.
El paciente era un hombre que falleció el 2 de agosto, ocho días después del inicio de los síntomas. El pueblo donde vivía está cerca de las fronteras con Sierra Leona y Liberia.
150 contactos identificados
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, dijo que el Ministerio de Salud de Guinea informó el caso a la agencia de la ONU el viernes.
La OMS está apoyando a las autoridades en la investigación de la fuente del brote, el rastreo de contactos y la formación de la comunidad local sobre las medidas de protección.
“Se han identificado y se les está dando seguimiento a unos 150 contactos, incluidos tres miembros de la familia y un trabajador de la salud, que han sido identificados como contactos cercanos de alto riesgo”, dijo Tedros a los periodistas en Ginebra.
La prefectura de Gueckedou es la misma región donde se detectaron inicialmente los casos del brote de ébola en Guinea este año, así como el brote de África Occidental de 2014-2016.
La enfermedad de Marburg tiene una tasa de mortalidad de casi el 90%, según la OMS. Actualmente no existe ningún tratamiento contra ella, aunque se están desarrollando vacunas, pero la rehidratación con líquidos por vía oral o intravenosa y el tratamiento de síntomas específicos, mejora la supervivencia.
Se han notificado brotes anteriores y casos esporádicos en el continente africano en Angola, la República Democrática del Congo, Kenia, Sudáfrica y Uganda.
La enfermedad se reconoció por primera vez en 1967, tras dos grandes brotes simultáneos en laboratorios de las ciudades alemanas de Marburgo y de Belgrado, capital de la entonces Yugoslavia.